CÓMO PLANIFICAR LAS VACACIONES DE NAVIDAD SIN MORIR EN EL INTENTO

Las Navidades ya están a la vista. Se acaba el año y es hora de que empecemos a planificar nuestras vacaciones invernales. Tanto si somos empleados como autónomos estamos deseando que lleguen para desenchufarnos de la rutina laboral. Eso sí, tomando las precauciones necesarias para que no disminuya nuestro rendimiento y productividad, si somos autónomos, o evitando que surjan tensiones y conflictos con nuestros compañeros si todos queremos tener vacaciones durante los mismos días. Aquí os dejamos una serie de consejos para que planeéis vuestras vacaciones, tanto si gestionáis un equipo como si trabajáis por vuestra cuenta.

1. Diseña un calendario. Si diriges un equipo, lo primero que tienes que hacer es diseñar un calendario de vacaciones, establecer dos turnos (entre Navidad y Fin de Año o entre Año Nuevo y Reyes) y fijar el número máximo de personas que pueden tener vacaciones a la vez en un mismo departamento. Si no lo acabas de cuadrar, marcas turnos para que tus empleados se intercambien las vacaciones.

• Dialoga con tu equipo, escucha sus necesidades y permite que se pongan de acuerdo e intercambien sus turnos si no afectan a la dinámica del equipo.

2. Cierra los proyectos. Irse de vacaciones tienes unas implicaciones muy importantes, especialmente para los autónomos. En la mayoría de casos, las vacaciones son sinónimo de cierre temporal del negocio. Lo mejor es que termines todos los proyectos que tengas entre manos. Será mejor para vosotros y para vuestros clientes.

• Dejar un proyecto a medias durante las vacaciones es un error. A la vuelta será como si lo retomaras desde cero.

3. Controla los números. No dejes ningún tema financiero pendiente antes de irte de vacaciones. Ten todo previsto para poder pagar a tus empleados, proveedores o colaboradores. Unas vacaciones sin dinero no son unas vacaciones.

• El pago puntual de las nóminas es la mejor garantía para un buen ambiente laboral. Deja todo atado y bien atado antes de irte de vacaciones.

4. Avisa a tus clientes. No olvides a quién te debes. Tus colaboradores y clientes se merecen estar al tanto de tu ausencia. Aprovecha los días previos a tus vacaciones para ser proactivo y notificarles personalmente los días en los que no estarás operativo. Una buena excusa para evaluar sus necesidades y trabajar en su fidelización.

• Antes de marchar, asegúrate que el correo y el teléfono están convenientemente redirigidos y especifican los días en los que estarás ausente.

5. Desconecta. Las vacaciones son muy necesarias. Cambiar de chip durante estos días, sin embargo, no siempre es fácil. Los trabajadores por cuenta propia suelen llevarse de vacaciones los problemas, proyectos y trabajos que tienen en cartera. Recuerda que, mientras estés de vacaciones, el contacto con el trabajo debe limitarse a casos de estricta necesidad.

• ¿Ya lo tienes todo listo? Cierra el ordenador y vete de vacaciones. Descansa y limpia tu mente.