El verano suele ser sinónimo de sol, playa, desconexión… y diversión. Pero no siempre, ni para todos. Siempre hay quien debe quedarse en la oficina soportando el intenso calor, el estrés acumulado, ver como los compañeros se empiezan a ir de vacaciones… un cúmulo de factores que provoca que el verano sea un periodo de baja productividad en las empresas. Con la llegada de los meses de verano la mayoría de las empresas se acogen a la jornada intensiva, una opción que los españoles ven en general con muy buenos ojos. Sin embargo, el problema llega cuando no sabemos gestionar las horas en esta nueva jornada a la que no estamos acostumbrados y cunde el desánimo. En este post te ofrecemos una serie de recomendaciones para aprender a gestionar bien la jornada intensiva, aumentar la productividad y, sobretodo, sobrevivir al verano en la oficina.
Planifica tu jornada. Las jornadas intensivas permiten disfrutar mejor de los días veraniegos por lo que son un buen incentivo para mejorar nuestra motivación. Lo importante es saber aprovechar bien la jornada. Sin una buena planificación, la optimización del tiempo es una tarea imposible. Al disponer de un menor número de horas para realizar las mismas tareas que antes distribuía a lo largo de una jornada completa, tienes que aprender a optimizar tus horas de trabajo, a ser más eficaz y resolutivo en la realización de tu trabajo diario.
Prioriza las tareas. Haz un listado de tareas para ir realizándolas una a una. De esta manera se tendrá una mayor conciencia del tiempo que lleva ejecutarlas y se aprenderá a distribuir mejor el tiempo. Aborda, en primer lugar, las más complicadas. Una vez las soluciones, el resto del día fluirá fácilmente y te sentirás más efectivo. Ser multitarea, tampoco ayuda. Hacer varias cosas a la vez no hace que vayamos más rápido, sino que hace que podamos cometer errores al no saber centrarnos bien en lo que estamos haciendo. Aborda las tareas de una en una. Serás mucho más efectivo.
Reuniones, las justas. Convoca reuniones sólo cuando sea imprescindible. De acuerdo que las reuniones son una excelente herramienta para favorecer la comunicación y la negociación, pero a menudo se pueden sustituir por una conversación telefónica o un mail. Si quedas con cliente, cambia la rutina. Cítalo en un espacio más informal, como una cafetería. Seguro que él también tiene ganas de salir de la oficina.
Prioriza las tareas diarias una a una. Hacer varias cosas a la vez no es sinónimo de efectividad
Aprovecha la tecnología. Si tu trabajo te tiene encadenado a un ordenador, por qué no pides que te dejen combinar en verano el trabajo presencial con el teletrabajo. Hay numerosas herramientas que te pueden ayudar y ahorrarte los desplazamientos a la oficina.
Mejora la colaboración. El verano es el periodo vacacional para muchos trabajadores, lo que obliga a los que se quedan a implicarse más en solventar el día a día de la oficina. Si eres jefe de equipo fomenta la colaboración entre los que quedan en la oficina para que el reparto de las cargas extraordinarias sea más equitativo. En este sentido, no estaría de más que organizarás alguna actividad recreativa para fortalecer y cohesionar más y mejor al equipo.
Reorganiza tu posición. Un espacio de trabajo adecuado no es el que está lleno de papeles, carpetas y demás utensilios de escritorio, que estarían mejor guardados en sus cajones o directamente en la papelera. Lo mejor es que en el escritorio solo tengas lo imprescindible. El resto, guárdalo en un lugar en el que puedas tenerlo a mano.
Aprende a desconectar. Cuando salgas de la oficina, desconecta de verdad. El tiempo de ocio es esencial para liberar la mente y prepararla para la nueva jornada. En este sentido, salir a pasear o hacer deporte hará que te sientas mejor. El ejercicio libera endorfinas, relaja, reduce el estrés y mejora el humor.
Prepara el futuro. Aprovecha la jornada intensiva para pensar en pasado mañana. Seguro que hay algún curso de inglés que siempre has querido hacer o algún curso de formación online para el que nunca encontrabas tiempo. Opciones que podrías activar este verano.
Si sigues estos sencillos consejos, los días de verano que faltan hasta que te toque marchar de vacaciones se te harán mucho más cortos y seguirás siendo un buen profesional, también en verano.